La temprana adopción en los años 90 de un estándar para la organización, el almacenamiento y la comunicación de la información médica impulsó una revolución en la informática médica en las dos últimas décadas del siglo XX. Ahora, en el siglo XXI, una nueva revolución parece estar cerca…
Desde principios de la década de 1980, se han realizado múltiples esfuerzos para definir esquemas de almacenamiento de imágenes e información médica, inicialmente en el contexto académico y de investigación. En aquellos años, aún no existían estándares de almacenamiento y menos de comunicación, por lo que cada fabricante encontraba una solución que se ajustara a sus necesidades de comercialización. Así, cada puesta en marcha de una solución de almacenamiento de información médica era una tarea titánica en términos de esfuerzo y coste.
Ya a principios de la década de los 90, se publicó la primera versión del estándar DICOM (Digital Imaging and Communication in Medicine), que rápidamente comenzó a ser adoptado por los principales fabricantes de la industria informática médica. Así es como el estándar DICOM se convierte en pocos años en un estándar internacional de datos sanitarios y en un protocolo de comunicación para el intercambio de imágenes médicas y datos relacionados. Fue la primera vez en la historia de la industria sanitaria que cada fabricante de hardware y software unificó criterios para interoperar y compartir información. Esta revolución impulsó la oferta y la demanda, ya que cada vez era más fácil implantar la tecnología en el contexto sanitario y cada centro médico podía decidir qué fabricante se adaptaba mejor a sus necesidades sin tener que enfrentarse al reto del cambio tecnológico.
Tras la adopción del estándar DICOM, se introdujo oficialmente el término sistema de comunicación y archivo de imágenes (PACS) para referirse exclusivamente a aquel componente tecnológico encargado de almacenar las imágenes médicas y su respectivo protocolo de comunicación para acceder a ellas. Estos sistemas estaban fuertemente ligados al estándar DICOM, lo que permitió una aparente estandarización en la forma de almacenar, transmitir y compartir los datos sanitarios. Años más tarde, los sistemas PACS recibieron otro nuevo impulso tecnológico, la consolidación de las tecnologías de redes informáticas y la reducción de los costes de almacenamiento. Este nuevo hito promovió la inclusión de estas tecnologías en los centros sanitarios más pequeños, lo que aumentó aún más su adopción en todo el mundo.
A principios del año 2000, los sistemas PACS comenzaron a incluir nuevas funcionalidades fuera de su definición inicial y su definición formal se hizo más difusa. Así, muchos fabricantes de PACS incluyeron funcionalidades como la visualización de imágenes DICOM, la gestión de modalidades DICOM, la gestión de listas de trabajo de modalidades, etc. Así, para aquellos que se limitan a la definición inicial de los sistemas PACS, un PACS sólo es responsable del almacenamiento, la organización y el esquema de comunicación, mientras que para otros un PACS debe gestionar la visualización e incluso la priorización de los casos.
En la última década, los sistemas heredados in situ han sido sustituidos por sistemas basados en la nube. Se estima que alrededor del 90% de las nuevas implementaciones de sistemas PACS están basadas en la nube. Se destacan algunos beneficios fundamentales de los sistemas basados en la nube: mayor escalabilidad, mayor disponibilidad, mejor seguridad, cumplimiento de la normativa y acceso eficiente al soporte técnico. Parece que el escenario actual para los sistemas PACS es el más adecuado posible. Sin embargo, la creciente necesidad de interoperabilidad fuera del estándar DICOM ha vuelto a plantear la necesidad de estandarizar la gestión no DICOM, fundamentalmente en contextos distintos a la radiología general. Aunque no se trata de un problema reciente, hemos vuelto al escenario en el que cada fabricante determina su mejor solución para el citado reto. Hoy hablamos de sistemas de archivo de proveedor neutral (VNA), para referirnos a la segunda generación de sistemas PACS desvinculados de las imposiciones establecidas por los fabricantes y con soporte ampliado para fuentes no DICOM. En la próxima entrega de esta serie, hablaremos un poco más del concepto moderno de VNA.
Jorge Rudas, Doctor en Biotecnología,
Jefe del equipo de innovación en el IMEXHS
Investigador en modelización computacional de sistemas biológicos en la Universidad Nacional de Colombia
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